Como afectan a las personas, las nuevas Cepas de la Covid-19

Los coronavirus son una amplia familia de varios virus que pueden causar diversas afecciones, desde el resfriado común hasta enfermedades más graves como las neumonías, antes de la COVID-19 ya se tenía experiencia con los dos coronavirus anteriores que afectaron al ser humano, esto fueron el causante del Síndrome Respiratorio de Oriente Medio conocido como MERS-CoV que surgió en el año 2012 y el otro que ocasionó el Síndrome Respiratorio Agudo Severo SARS-CoV que surgió en el año 2003.

El nuevo ‎coronavirus, que ahora se conoce con el nombre de 2019-nCoV, no se ‎había detectado antes de que se notificara el brote en Wuhan (China) ‎en diciembre de 2019, y a partir de esta fecha se comenzó a diseminar a todos los países del mundo, convirtiéndose en la peor Pandemia que ha padecido la humanidad, teniendo hasta el 16 de julio del año 2021 casi 190 millones de personas infectadas y con más de 4 millones de fallecidos.

En abril de presente año el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social -MSPAS- informó el hallazgo de 3 nuevas cepas del COVID 19 en el territorio nacional, las cuales son capaces de infectar a más personas por lo fácil de su contagio y sobre todo puede llegar a producir síntomas de la enfermedad más agresivos y graves. Las cepas encontradas fueron la cepa brasileña, la de Reino Unido e Irlanda del Norte y la de Sudáfrica.

Antes que todo es importante conocer que es una Mutación, en este caso una mutación viral, y se refiere a la modificación de algunas características del virus en el momento de su replicación o multiplicación, este virus que durante su replicación cambió o modificó algunas de sus características se dice que sufrió una “Mutación”, y por lo tanto se produjo un virus con algunas características diferentes al virus original; es entonces a partir de este nuevo virus que comienza a desarrollarse una nueva “Cepa” o población de nuevos virus.

 

 

La parte interna del virus donde se dan las modificación, es lo que se conoce como la proteína constituyente del material o información genética de los seres vivos, ADN (ácido desoxirribonucleico) o ARN (ácido ribonucleico) dependiendo del tipo de microrganismo. Cuando un virus se divide hace una copia de su ADN o ARN para el nuevo virus y algunas veces esa copia no es perfecta, esa pequeña diferencia de la secuencia del ADN original es lo que se conoce como Mutación.

 

 

La mutación, no es un evento inesperado o imprevisto, ya que el ADN y el ARN son moléculas muy frágiles y que están en constante movimiento debido a que se copian frecuentemente por la replicación del virus, en el caso del virus de la COVID 19, esta replicación sucede cuando el virus entra a nuestro cuerpo para producir la infección y luego la enfermedad; por eso no es sorprendente que los virus al mutar se vuelvan más infecciosos. Como ya se dijo una variante es una mutación que ocurre en el virus luego de un tiempo, a medida que el virus infecta a las personas, tiene la oportunidad de replicar y con esto la posibilidad de que se produzcan errores o mutaciones.

Entonces las nuevas mutaciones de los virus pueden llegar a ser más fuerte y por lo mismo comenzar a competir con los virus anteriores, los que les dieron origen, desplazándolos muchas veces ya que pueden llegar a ser más transmisibles y más infecciosos. Las mutaciones más transmisibles suelen comerles el terreno a las menos transmisibles, es decir de una manera gráfica, si un virus ha puesto su toalla para ocupar un sitio en una playa ya no deja terreno para otra cepa, o al menos va a tener más dificultad.

Este fue el caso con las nuevas cepas o variantes de la COVID 19, en muchos países ya se ha demostrado que el cambio o la mutación de sus características las han convertido en cepas más agresivas porque están infectando a más personas y con mayor rapidez, pero sobre todo produciendo síntomas de la enfermedad más graves como neumonías. Además, las estadísticas están demostrando que están afectando cada vez más a la población joven, en relación con las cepas originales, lo que significa que una mayor parte de la población se va a ver más afectada.

 

¿Qué hay que hacer para protegerse de estas nuevas cepas?

Definitivamente las medidas de protección o medidas sanitarias sigue siendo lo primordial para la prevención:

1. Distanciamiento social: guarde al menos 1 metro de distancia entre usted y otras personas, a fin de reducir su riesgo de infección cuando otros tosen, estornudan o hablan. Mantenga una distancia aún mayor entre usted y otras personas en espacios interiores. Recuerde que cuanto mayor distancia, mejor.

 

 

2. Uso de mascarilla: convierta el uso de la mascarilla en algo rutinario y sobre todo como algo normal de su interacción con otras personas. Sin embargo, para que las mascarillas sean eficientes, es importante saber utilizarlas, guardarlas y sobre todo desecharlas correctamente.

• • El lavado de manos antes y después de ponerse o quitarse la mascarilla.
  • La mascarilla debe de cubrir la nariz, la boca y el mentón, esa es su verdadera función.
  • Si es necesario quitarse, se debe de guardar en una bolsa plástica limpia y exclusiva para ella.
  • Se ha demostrado que las mascarillas con válvulas no son efectivas.

 

 

3. El lavado de manos: una de las principales partes de nuestro cuerpo por medio de la cual se trasmiten muchas enfermedades, son las manos, es con las manos que nosotros interactuamos y tocamos mucho de lo que encontramos en nuestro medio ambiente diario, eso hace que las manos se convierte en un instrumento transmisor de enfermedades, este se ha demostrado sobre todo en tema del coronavirus, por ello la importancia del lavado con agua y jabón preferentemente o uso de gel con alcohol. El lavado de las manos se debe de hacer las veces que sea necesario para evitar que uno mismo pueda llevarse el virus la organismo, al tocarse los ojos, la nariz y la boca, como las principales puertas de entrada del virus, y también para evitar la propagación del virus a otras ambientes o personas.

 

 

Evite las 3 “C”: espacios cerrados, congestionados o que entrañen contactos cercanos.

• Se han notificado brotes en restaurantes, ensayos de coros, clases de gimnasia, clubes nocturnos, oficinas y lugares de culto en los se han reunido personas, con frecuencia en lugares interiores abarrotados en los que se suele hablar en voz alta, gritar, resoplar o cantar. Los riesgos de contagio con el virus de la COVID-19 son más alto en espacios abarrotados e insuficientemente ventilados en los que las personas infectadas pasan mucho tiempo juntas y muy cerca unas de otras. Al parecer, en esos entornos el virus se propaga con mayor facilidad por medio de gotículas respiratorias o aerosoles, por lo que es aún más importante adoptar precauciones.

 

• Reúnase al aire libre. Las reuniones al aire libre son más seguras que en interiores, en particular si los espacios interiores son pequeños y carecen de circulación de aire exterior.

 

Evite lugares abarrotados o interiores, pero si no puede, adopte las siguientes precauciones: abra una ventana. aumente el caudal de ventilación natural en los lugares cerrados, no olvide el uso de la mascarilla.

 

¿Qué debe hacer si se siente mal?

 

 

• Es importante conocer todos los síntomas de la COVID-19. Los síntomas más comunes de la COVID-19 son: fiebre, tos seca y cansancio. Otros síntomas menos frecuentes que pueden afectar a algunos pacientes son: pérdida del gusto o del olfato, dolor de cabeza, faringoamigdalitis, congestión nasal, ojos enrojecidos, diarrea o erupción cutánea.

 

• Permanecer en casa en autoaislamiento, aun cuando tenga síntomas leves tales como tos, dolor de cabeza y febrícula, hasta que se recupere. El riesgo de dispersar el virus existe y es eso lo que se quiere evitar. Solicite ayuda para que le provean los necesario, de forma que no tenga que salir de su caso, pero si esto fuera necesario utilice la mascarilla y mantenga las medidas de prevención sanitarias.

 

• Si tiene fiebre, tos y dificultad para respirar busque atención médica de inmediato. Trate de contar inicialmente a un servicio de salud para su orientación, de que hacer y a donde dirigirse en caso de empeorar su estado clínico.

 

• Manténgase actualizado con la información más reciente y de fuentes confiables, que le ayuden a conocer la situación de esta enfermedad en su comunidad y de cómo se debe de actuar ante emergencias.